Ana es mi amiga, nos conocemos desde niñas y durante toda la vida hemos mantenido una amistad especial, no marcada por las obligaciones ni los compromisos, sin fechas determinadas sabiendo ambas donde estábamos y también que siempre estábamos ahí para lo bueno y para lo malo. Lo cierto es que ha habido muchos más momentos buenos que malos aunque a veces eso cuando vienen mal dadas se olvide.
Habitualmente quedamos para tomar café un día entre semana en un café tranquilo donde pasamos nuestros ratitos. Ana actualmente está pasando por un mal momento personal, está como dice ella introducida en un laberinto del que no encuentra la salida.
Ese laberinto como ella lo denomina no es otra cosa que miedo, nacemos libres, pero pronto recién llegados a este mundo se nos empieza a inculcar cierta cultura que conformará nuestra vida, vivimos atenazados en todas las facetas de nuestras vidas y cuando las situaciones se agudizan el miedo a enfrentarnos a ellas nos pone frente a nuestro propio espejo.
El miedo Ana, el miedo, a perder lo que tienes, pero tienes algo?
Estas sociedades modernas, basadas en la esclavitud del ser humano, en la libre competencia, libre mercado, consumismo imperante están basadas en eso y eso es lo que nos impide avanzar como persona. Tenemos miedos constantes, a perder el trabajo y por tanto admitimos condiciones impropias de este siglo, a perder nuestro bienestar económico y por ello entramos en el sistema crédito/intereses más créditos y más y más.
Miedo a decir la verdad, si la dices serás un excluido, miedo a expresarnos porque serás un proscrito, miedo en definitiva a enfrentarnos a las decisiones que debemos tomar.
Ana las que te llevarán a la libertad.
Habitualmente quedamos para tomar café un día entre semana en un café tranquilo donde pasamos nuestros ratitos. Ana actualmente está pasando por un mal momento personal, está como dice ella introducida en un laberinto del que no encuentra la salida.
Ese laberinto como ella lo denomina no es otra cosa que miedo, nacemos libres, pero pronto recién llegados a este mundo se nos empieza a inculcar cierta cultura que conformará nuestra vida, vivimos atenazados en todas las facetas de nuestras vidas y cuando las situaciones se agudizan el miedo a enfrentarnos a ellas nos pone frente a nuestro propio espejo.
El miedo Ana, el miedo, a perder lo que tienes, pero tienes algo?
Estas sociedades modernas, basadas en la esclavitud del ser humano, en la libre competencia, libre mercado, consumismo imperante están basadas en eso y eso es lo que nos impide avanzar como persona. Tenemos miedos constantes, a perder el trabajo y por tanto admitimos condiciones impropias de este siglo, a perder nuestro bienestar económico y por ello entramos en el sistema crédito/intereses más créditos y más y más.
Miedo a decir la verdad, si la dices serás un excluido, miedo a expresarnos porque serás un proscrito, miedo en definitiva a enfrentarnos a las decisiones que debemos tomar.
Ana las que te llevarán a la libertad.
Me ha gustado mucho tu comentario y estoy de acuerdo en tu reflexión sobre el miedo que nos esclaviza.
ResponderEliminarSaludos.
¡Hola Eritia!
ResponderEliminarPienso que…
De todas formas, y al margen de otras cuestiones,
Se es más libre y se respira mejor, haciendo y diciendo lo que se piensa
Por más que no se comparta las ideas con los demás, con el resto…
De todas formas, somos excluidos, somos simplemente “Gente”
Pero indudablemente,
Gente con Sentimientos vivos,
Luego se debe vivir esa dignidad como Persona,
por medio de la Libertad de Expresión…
Saludos de J.M. Ojeda